No renuncies a tu capa protectora.

Por suerte para mi, fue algo tardío, pero, por desgracia llegó. El vello corporal. ¡Ese gran enemigo de la mujer!

Tenia unos 13 años cuando comencé a tener vello en axilas, piernas, bigote... Además no era un vello disimulado, rubio como el que, por suerte, muchas chicas tienen. Yo era muy peluda, un vello oscuro "feo".
Yo, no  quería depilarme. Todo el mundo decía que eso dolía, la gente me hablaba de heridas, lágrimas, escozor... yo no quería todo eso, yo solo quería sentirme bien con mi vello pero... fue imposible.

Durante semanas mi hermana y mi madre me repetían a diario que era feo que era antihigienico. A mi me daba todo igual, yo solo quería que me dejaran tranquila. Un día, mientras tomábamos un aperitivo en un bar, volvieron a insistir hasta que accedí a hacerlo.

Por aquella época yo ya estaba teniendo algunos problemas de acoso en el colegio.
Iba a un colegio católico concertado en el cual el uniforme de las chicas consistía en una falda por debajo de la rodilla y un polo de manga corta. Las chicas no podíamos llevar nada que mostrara más arriba de nuestras rodillas ni nada que nos dejara mostrar los hombros ni las clavículas.
Ese acoso se incrementó al empezar el verano. Dejé de llevar medias para pasar a llevar calcetines lo cual dejó ver que yo, no me depilaba. Me llamaron mono, chewaka, guarra. Incluso los profesores me decían que debía depilarme, que no estaba bien eso, que era antihigienico -una vez más esa palabra-. Intenté llevar calcetas y que no se movieran para que no se viera mi vello pero, no servía. Asi que, me vi obligada a depilarme por la presión social.

Finalmente fui a depilarme y el hecho de tocar mi piel suave después de la cera me hizo sentirme bien.
Recuerdo una frase de mi madre con una sonrisa "¿has llorado?" Yo muy rápido respondí NO. Ella se rió y me dijo "no te preocupes es normal". Yo mantuve mi negativa. Era mentira.
Después de unos días el pelo volvió y me frustré ¿toda mi vida iba a ser así?
Que tortura.

Desde aquel momento, cada vez que me salía el mínimo vello intentaba esconderlo, que no se viera. Si llevaba tirantes no levantaba los brazos -no sabéis lo incomodo que es hacerse una coleta intentado que no se vean tus axilas-. En pleno verano me ponía pantalones largos para esconder el pelo.
Lo pasaba muy mal y, al mínimo comentario solo quería que me tragara la tierra.
Aún así siempre pensé que eso no estaba bien, que depilarse no es lo normal, que si ese pelo está ahí, será por algo... y, algunos días me empoderaba y decidía salir sin que nada me importara pero, esos días siempre alguien decidía opinar sobre algo que poco debería importarle: mi cuerpo, mi vello.

A día de hoy, mi vello me sigue frustrando, pero, día a día intento darle menos importancia. Día a día soy más fuerte para decir:
Este es mi cuerpo, mi vello. Yo decido.
Pitusa

Comentarios

  1. No sabes lo identificada que me siento, yo también me he sentido "obligada" a depilarme y he debatido mil veces el asunto con mi madre, que es quien me presionó a empezar con "el arranque de pelos".
    "¿Pero si papá tiene pelos en las piernas, por qué yo no puedo? Mmmm, porque él es un chico y no queda tan feo".
    "Entonces desearía ser chico. Ellos sí pueden decidir libremente sobre su vello".
    "Tú también, hija. Nadie te apunta con una pistola para hacerlo".
    "No hace falta que las pistolas sean visibles".
    Hay cosas que están tan interiorizadas en la sociedad que cuando alguien decide "no hacer como el resto", sufre las consecuencias y a un precio muy poco agradable.
    Yo hoy en día, me sigo depilando, pero con menos frecuencia.
    Soy peluda a más no poder, más que mi pareja incluso.
    Pero mi pareja fue la primera en decirme que no entendía como podía depilarme con lo que debía doler y que siempre me veía hermosa, estuviera como estuviera.
    Joder era el comentario que llevaba tiempo esperando. ¡Qué alguien aceptara mi vello!
    Y si a ti aún nadie te lo ha dicho, lo haré yo.
    "Tú vello, es bello. Nunca te avergüenzes de él, porque forma parte de ti y tenerlo no es antinatural. Lo que sí es, es ser el único animal que se quita pelos de su cuerpo por estética...".

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  2. Si no te quieres depilar, no lo hagas.
    Pero hay alternativas a parte de la cera!!! O de las máquinas.
    Puedes usar cuchillas, no duele. Las cuchillas de Wilkinson son muy buenas, tienen un jabón de Aloe vera muy guay.

    No es necesario que te depiles con cera... Yo solo lo hice una vez, y para el resto tiro de cuchilla.

    Bueno, las piernas me las depilé alguna vez con cera, porque no tenía cuchillas a mano y tenía que depilarme por X, y no me dolió tanto con la máquina de cera de Veet.

    Y se dice mucho que no depilarse es antihigiénico. Antihigiénico es no ducharse..

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